martes, 14 de mayo de 2019

NOVATA 33

EL RADIOTELESCOPIO ALMA Y LA SUIT ALBÉNIZ

Nada qué ver el Universo con la Música o, tal vez, sí...


Quiero compartir hoy los sentimientos que he experimentado en dos eventos de asistencia gratuita, programados desde distintos foros sociales en la ciudad de Valencia, en la primera semana del mes de mayo.

Considero que estas experiencias son todo un lujo para intelecto que se deje llevar por el aura lumínica de las Estrellas, o por la cadencia armoniosa de la notas que suenan en el piano mientras uno lee en su interior "Observando con ALMA".

El martes, Felix y yo acudimos a una conferencia en la sede de la Fundación Cañada Blanch del Director del Observatorio Astronómico Nacional D. Rafael Bachiller.

El jueves, en la Sala Clemente, tuvo lugar la presentación del libro Suit Albéniz escrito por Alfonso Alzamora, biznieto del compositor, acompañado por el pianista Claudio Carbó que realizó una sentida interpretación de algunas de las piezas populares del compositor.

Si algo aprende uno de las personas que vibran y te 'acarician' mientras comparten lo que aman, es su sencillez y naturalidad al expresarse.

Así siento yo...

La inmensidad del Universo tiene su remanso en la belleza que muestra al ser observado.
La grandiosidad de la Música promueve el sentimiento de búsqueda del infinito imaginario al que te transporta.
Me llama la atención del Radiotelescopio ALMA el sistema de cooperación conveniente y necesario para lograr los objetivos astronómicos propuestos: "66 antenas juntas funcionan como si fueran un solo telescopio (interferometría)".

Como siempre, tomamos nota de la Naturaleza: "El sistema auditivo humano está diseñado de tal modo que cada uno de sus componentes cumple una función muy similar a ALMA, en este caso con el propósito de hacer llegar el sonido al cerebro".


La Historia de los seres Humanos en la Tierra se completa y se comprende desde la cooperación...
Sin embargo, lo noticiable se ajusta al desacuerdo; el lado oscuro que impide ver la grandiosidad de la Naturaleza que habita en cada ser vivo.
Leer en voz alta, y que otro te escuche, es un ejercicio en menor medida practicado en pareja; aunque en ocasiones las circunstancias mandan y esto se convierte en una actividad placentera.
No quiero alargar esta entrada con mis palabras. Mucha información hay para gozarla desde los enlaces compartidos.

Eso sí, quiero agradecer a los organizadores el talento y la sensibilidad de sus programaciones que, desde luego, doy a conocer en las redes sociales a los amigos y allegados en cuanto tengo noticias de ello.

Si te ha gustado, comparte. ¡Gracias!

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